Nueva derrota de
Tigre esta vez en Santa Fe frente a Colón. Curuchet, Prediger y Gigliotti para
el Sabalero. Maggiolo en dos oportunidades marcó para la visita. Se viene
Palmeiras por la
Copa Libertadores. Partidos trascendentales.
¿Por qué lo perdió Tigre?
Porque salió dormido a la cancha.
Porque no supo ajustar las marcas en cada pelota parada.
Porque no convirtió en los momentos cruciales, cuando Colón
estaba muerto.
Porque, salvo hoy que se iluminó Maggiolo, no tiene
delanteros que la metan.
Porque al quedar en superioridad numérica, atacó pero sin
ideas.
Porque los cambios no influyeron en lo más mínimo.
Y porque el equipo está partido al medio.
Por todas esas razones el Matador perdió un partido
increíble, un partidazo.
Colón tuvo para golearlo en el primer tiempo. Esos dos goles
de entrada dejaban mal parados a los de Gorosito. Por suerte en esa etapa,
Botta y Pérez García metieron el balón debajo de la suela y comenzaron a jugar.
Llegaron los tantos del Lechuga Maggiolo para empardar las cosas. A partir de
allí se hizo un partido parejo, con situaciones en las dos áreas.
Ya en la segunda etapa, los dueños de casa apretaron de
entrada, con un jugador como Curuchet bastante enchufado. El autor del primer
grito rojinegro, estrelló un remate en el poste.
Luego el juego cambió de manos. Gabriel Peñalba comenzó a
manejar la pelota con mucha autoridad y a ponerle una pausa al ritmo frenético
que llevaba el encuentro. Tigre se adueñó de las acciones sobretodo por la
expulsión del central Romero. Pero los centros al área, y los remates desde
afuera no sirvieron para quebrar la
valla defendida por Andrés Bailo, quien había reemplazado al titular Pozo
lesionado.
Sobre el final llegó la expulsión de Gastón Díaz y el gol de
Emanuel Gigliotti. El delantero recibió en el área rodeado de camisetas azules
y rojas, pero no se puso nervioso y definió al palo de Javier García.
No hubo tiempo para más. Fue derrota y a pensar en la Copa Libertadores viajando a
Brasil para enfrentar al Palmeiras.