sábado, 4 de octubre de 2008

EL DÍA QUE CAYÓ EL MURO

La muralla en la zona defensiva que Tigre construyó desde el principio del campeonato, fue vulnerada en la noche de Rosario. Es verdad, faltaba uno de sus principales eslabones ya que Blengio estaba afuera por lesión, pero el trabajo de la defensa fue muy flojo. En líneas generales todo el equipo estuvo en distinta sintonía. Morel no fue el mismo que en las últimas presentaciones, Lázzaro no tuvo ninguna chance concreta de gol y Altobelli solo guapeaba y corría pero no lastimaba. Ñewell´s manejo muy bien el partido, el primer tiempo se jugó practicamente en el campo del equipo visitante. La primera llegada vino después de un mal despeje de Paparatto lo que derivó en un remate de Leándro Torres que Islas desvió al córner. La única llegada clara del equipo de Diego Cagna en el partido fue un ataque de Altobelli, la defensa de Ñewells quedó mal parada y el delantero asistió a Matías Giménez que sacó un buen remate que fue interceptado y desviado afuera por el arquero Peratta. Inmediatamente llegó la respuesta del equipo local. Un centro desde la derecha al medio del área, Cristian Fabbiani la baja de pecho y Diego Torres marca el tanto que le pintaba la cara de color esperanza y de alegría a los hinchas rosarinos.
Tigre estaba completamente perdido y no encontraba el camino para llegar al arco rival, regalaba demasiadas pelotas y cedía mucho terreno de juego. Fue así que sobre el final del la primera parte, Fabbiani en una gran jugada individual, se libró de las marcas de tres defensores de Tigre como si nada (Arruabarrena, Paparatto y Fonatanello) y asistió a Vangioni que anotó el segundo gol con el arco vacío.
La parte final del encuentro fue más de lo mismo ya que los dirigidos por Fernando Gamboa seguían aprovechando la impresición de la visita para generar sus ataques pero chocaban con Daniel Islas que salvó en algunas ocasiones al "Matador".
Los 5 minutos que estuvo demorado el juego por los fuegos de artificio de la hinchada local le pusieron paños fríos al partido y los jugadores de ambos equipos bajaron la persiana.
Ahora San Lorenzo es más puntero que nunca. Le sacó 5 puntos de ventaja a Tigre y al nuevo escolta Newell´s. Cagna deberá hablar mucho con los jugadores porque no tuvieron una buena noche. A priori el partido se presentaba como muy complicado y lo fue, pero el Matador contribuyó y mucho para que las cosas se compliquen.
La próxima fecha será en el Monumental de Victoria frente a Lanús que está teniendo un buen presente futbolístico. Es un buen desafío para un equipo que debe mejorar.

1 comentario:

Anónimo dijo...

para que veas que si entro a ver tu blog,pese a que detesto a tigre,pero reconozco que te tengo que evaluar por como te explayas cuando das el informe sobre los partidos de tu amor incondicional...Sinceramente está bastante mejor que a principio de año,a mi gusto tenés que pulir pequeñas cositas pero vas bien. Bueno nene te dejo y felicitaciones.Alejandra